Predicaciones Miguel Díez - Solidaria TV

Esta predicación de Miguel Díez sobre ser los requisitos de un soldado de Cristo explora los compromisos y desafíos que un creyente debe asumir para vivir en completa entrega al Señor. El soldado de Cristo no solo cree, sino que actúa con disciplina, integridad y devoción al Evangelio. Este llamado implica ser discípulo comprometido y obrero diligente, siempre listo para enfrentar dificultades, como destaca en 2 Timoteo 2:3: “Sufre penalidades como buen soldado de Jesucristo”. Díez también enfatiza la importancia de la fidelidad y la enseñanza sincera, señalando que un verdadero soldado debe vivir lo que predica. A través del bautismo del Espíritu Santo y el "bautismo de fuego", el soldado se fortalece para la guerra espiritual, protegido con la armadura de Dios (Efesios 6:11). Además, el amor hacia Cristo y el sacrificio constante en el altar de la obediencia son esenciales para enfrentar cualquier oposición con humildad y perdón. Ser soldado de Cristo es vivir una vida marcada por la pureza, sinceridad y disposición total al llamado de Dios, reflejando el amor y el propósito divino en cada acción.

Esta predicación, inspirado en el llamado de Isaías "Heme aquí, envíame a mí", desafía a los creyentes a responder con disposición al servicio de Dios. La predicación enfatiza que cada discípulo pasa por un proceso de llamado, elección, unción y envío, destacando que ser enviado implica un compromiso profundo y una misión clara en la obra de Cristo. Es esencial formar discípulos fuertes, capaces de enfrentar las batallas espirituales y equipados con dones del Espíritu para sanar y liberar. La multiplicación y el crecimiento en Cristo son fundamentales; los enviados deben madurar en la fe y el amor para llevar el Evangelio con eficacia. La predicación toma como ejemplo la primera predicación de Pedro y la misión de los discípulos en los Hechos, para recalcar que cada creyente tiene un propósito único e irremplazable en la misión de Dios. Con una visión global, se motiva a los creyentes a ser enviados hacia diferentes naciones y comunidades, guiados por el Espíritu Santo. La invitación final es a responder con valentía, ofreciendo la vida para el servicio y obedeciendo el llamado divino, confiando en que Dios tiene un plan específico para cada uno. Predicación en el congreso de la iglesia Cuerpo de Cristo en Buenos Aires Oct 2024.

Miguel Díez y Ramón Ubillos abordan la compleja realidad de los conflictos internacionales y su impacto en la sociedad actual desde una perspectiva bíblica. Discuten cómo países como Corea del Norte y Rusia, junto con la implicación de Estados Unidos en el conflicto de Ucrania, reflejan una dinámica geopolítica tensa y peligrosa. Además, analizan la situación en Medio Oriente, especialmente en Israel, destacando la posibilidad de que estos conflictos se intensifiquen a nivel mundial. La charla también toca el impacto económico de las guerras, evidenciando cómo los recursos energéticos son utilizados como palanca para manipular precios y beneficiarse de la situación. En este contexto, la situación en América Latina, particularmente en Bolivia y la corrupción relacionada con el narcotráfico, fue un tema crítico. Se hace un llamado a la acción humanitaria, resaltando la labor de Remar en desastres cómo las actuales inundaciones en Valencia y la importancia de responder con compasión. La charla concluye con reflexiones sobre el futuro, basándose en las profecías bíblicas que predicen conflictos y la eventual restauración del reino de Cristo, enfatizando la necesidad de actuar con amor y solidaridad en tiempos de crisis.

Predicación en el congreso Remar Internacional con el lema: Vírgenes Sensatas. En esta predicación, Miguel Díez explora cómo obtener y mantener la unción del Espíritu Santo, elemento esencial para la vida cristiana. Utilizando la parábola de las vírgenes, recuerda la importancia de tener nuestras “vasijas” llenas del aceite del Espíritu, que simboliza la gracia y el poder divino. La unción permite actuar con fe, realizar milagros y vencer las adversidades, tal como lo hizo Pedro al ser transformado y usado por Dios para sanar y liberar. Díez subraya la necesidad de una iglesia donde el poder de Dios se manifieste a través de sanaciones y milagros. La unción es clave para una evangelización efectiva, como en Pentecostés, cuando Pedro predicó y miles se convirtieron. Además, explica que la verdadera sabiduría proviene de una relación activa con el Espíritu Santo, y no solo de conocimiento teórico. La invitación es a vivir en comunión con Dios, buscar Su presencia y depender de Su guía y poder para ser un canal de Su amor en el mundo.