A finales de los años 90 pasaron muchas cosas que están marcadas en la memoria colectiva de España. Los asesinatos de Gregorio Ordóñez y de Miguel Ángel Blanco ...
A finales de los 90, ETA mutó su estrategia y amplió su lista de objetivos. De repente, la amenaza dejó de estar acotada a unos pocos y se extendió entre la población civil. Ante el peligro creciente, el gobierno de Aznar tomó una decisión sin precedentes: cambiar la ley para proteger a miles de personas. Y así, de la nada, nació una profesión que hasta entonces no existía en España. Cientos de hombres y mujeres, sin apenas experiencia, se convirtieron en escoltas y aterrizaron en el País Vasco con la misión de resguardar vidas ajenas, sin saber aún cómo afectaría eso a la suya propia. Si eres suscriptor de ABC Premium, puedes escuchar el documental sonoro completo
--------
30:14
Prólogo - ¿Por qué hacemos este pódcast?
‘Escoltas: la sombra que me protegía de ETA’ es una investigación periodística de ABC realizada por Israel Viana y producida por el equipo de Pódcast del ABC.
--------
8:23
Trailer - Escoltas: la sombra que me protegía de ETA
A finales de los años 90 pasaron muchas cosas que están marcadas en la memoria colectiva de España. Los asesinatos de Gregorio Ordóñez y de Miguel Ángel Blanco abrieron un nuevo episodio de terror en el País Vasco. Cambiaron las reglas del juego y el Estado tuvo que actuar dando protección a cualquiera que levantase la voz contra ETA, entre ellos concejales de pueblo, periodistas o profesores. Cerca de 3.000 escoltas privados sirvieron en el País Vasco entre los años 1999 y 2012. La suya fue una profesión nueva, que se creó de la nada y con gente que apenas tenía experiencia. En ese camino marcado por la violencia, se crearon nuevas relaciones, se rompieron familias y se convivió con un enemigo invisible y letal. A lo largo de cinco episodios, en este pódcast escucharemos los testimonios de cinco escoltas, un ertzaina, un formador, tres protegidos y un periodista de ABC amenazado por ETA. Son historias de supervivientes que se acabarán cruzando entre sí conforme avanza el relato. El final de ETA en octubre de 2011 supuso una gran noticia para todos, pero paradójicamente los escoltas se quedaron sin trabajo y sin medio de vida. Olvidados y sin futuro, tuvieron que reciclarse como pudieron en una sociedad que ni siquiera les había dado las gracias. Los escoltas privados no perdieron ni un solo protegido durante sus años de servicio. Esta es su historia.
Acerca de Escoltas: la sombra que me protegía de ETA
A finales de los años 90 pasaron muchas cosas que están marcadas en la memoria colectiva de España. Los asesinatos de Gregorio Ordóñez y de Miguel Ángel Blanco abrieron un nuevo episodio de terror en el País Vasco. Cambiaron las reglas del juego y el Estado tuvo que actuar dando protección a cualquiera que levantase la voz contra ETA, entre ellos concejales de pueblo, periodistas o profesores.
Cerca de 3.000 escoltas privados sirvieron en el País Vasco entre los años 1999 y 2012. La suya fue una profesión nueva, que se creó de la nada y con gente que apenas tenía experiencia. En ese camino marcado por la violencia, se crearon nuevas relaciones, se rompieron familias y se convivió con un enemigo invisible y letal.